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Un blog de relatos eróticos y cocina con solera. Los relatos narran las aventuras de cuatro mujeres divorciadas y sus conversaciones sobre sexo y hombres. Las recetas se elaboran siguiendo viejos cuadernos de cocina, escritos a principios del siglo XX


jueves, 24 de mayo de 2012

Croquetas caseras en dos actos

     Para preparar las exquisitas croquetas que muestro en las fotos necesitas, básicamente, dos cosas: una elevada dosis de paciencia y la misma de amor, pasión o deseo, según encarte. La familia, amigos o el amante de turno te lo agradecerán. Si se trata de éste último, pídele que haga de pinche para llevarse luego un beneficio extra...
                                                 
     
     Ingredientes:
-La compañía de la pareja, amante de turno, amigo especial, ínclito o susodicho.
-300 gramos de pollo y/o carne sobrante del cocido o de cualquier otro guiso (pollo asado, por ejemplo).
-Media cebolla, un diente de ajo y un vaso de caldo de carne o de verduras.
-Aceite de oliva, medio litro de leche, dos cucharadas soperas bien colmadas de harina, uno o dos huevos batidos, pan rayado, sal y una pizca de pimienta.
     Elaboración:
    Es importante acordarse de hacer croquetas cuando tengas caldo de verduras o de cocido, y si además te han sobrado carne o pollo de éste último guiso, mejor. Lo ideal es la compañía del amante de turno o amigo especial. En caso de que los invitados sean amigas/os, qué le vamos a hacer. Digo esto porque el segundo acto no será tan entretenido... Sigue leyendo y averiguarás por qué.
     Primer acto: Pon al susodicho/a a picar media cebolla y un diente de ajo muy menuditos y a deshacer la carne. Si la visita son tus amigas, lo ideal es que emprendan una conversación jugosa mientras te ocupas tú. Terminada esta labor hay que cubrir de aceite de oliva una sartén grande y plana y sofreír la cebolla y el ajo. Cuando estén dorados, añadir la carne, sal, una pizca de pimienta y mezclar. Echar un vaso de caldo y remover. Ya está listo para hacer la bechamel con la participación de la pareja en cuestión, si es que está. Dejar el preparado de la sartén a fuego lento, añadirle dos cucharadas soperas de harina y, con una cuchara de madera, remover y remover hasta deshacer los grumos. Echar medio litro de leche y seguir removiendo.
    Segundo acto: Es necesario permanecer así, muñeca en danza y a fuego lento, unos 45 minutos como mínimo, hasta que la bechamel adquiera la consistencia adecuada para poder liar las croquetas. Mi consejo es que pongas una música sugerente, te muevas al ritmo y que el susodicho/a, por detrás, pasee sus manos por toda la extensión de tu anatomía, también al ritmo. Vosotros calcularéis el tiempo necesario para culminar ambos actos, el culinario y el sexual. Aviso a navegantes: si os dejáis arrastrar en exceso por esta última actividad corréis el riesgo de que se quemen la bechamel y más cosas. En caso de que os azote la prisa, controlarla y terminar la masa. Como es necesario que se enfríe antes de fabricar las croquetas, queda un margen de varias horas para entregarse con dedicación exclusiva al acto por excelencia (supongo que  no tengo que deciros cuál es)
                                                                 
     Saciado el deseo sexual tendréis mejor disposición para llevar a buen fin el tedioso proceso de empanar las croquetas, paso imprescindible para saciar el gastronómico. Poneros los dos, tenedor en mano, a darle forma a la masa. En caso de que no tengáis claro cuál deberían adoptar vuestras croquetas, el asunto consiste en tomar la medida de una de las unidades del par del ínclito y moldearlas en consecuencia. El jueguito puede dar para mucho, porque seguro que cada uno de vosotros modela la croqueta de un tamaño distinto (mayor la que haga el macho, ya veréis...). Una vez formadas, mojarlas en huevo batido primero y después en pan rallado. Freírlas en aceite de oliva muy caliente y cuando se enfríen, a disfrutar...  Un planazo estupendo para el fin de semana, con el que saciaréis las dos necesidades más básicas de cualquier ser humano. ¿Qué os parece? Espero vuestros comentarios.                              
                                                                                                                           


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